Leonilda [Expediente]

Leonilda Un corazón es una riqueza que no se vende ni se compra, sino que se regala.

• Edad: Desconocida, aparenta 23 años.
  
• Facción: Upright (Leopardos).
  
• Afinidad: Natura.
  
• Especialidad: Destreza.
  
• Mundo Natal: Coliseo del Olimpo.
  
• Atracción sexual: Heterosexual.
  
• Apodo: Leo, Chica seria.
  

Leonilda se trata de una joven de porte delgado aunque fuerte, por las continuas sesiones de entrenamiento que lleva a cabo tanto dentro de la academia como fuera de la misma. Mide 166 centímetros en altura y no alcanza a rebasar los 57 kilogramos en peso. También cuenta con una tez blanquecina y suave al tacto que se extiende a través de su liviano cuerpo pero algo magullado hasta dar con sus delgados brazos y piernas. A su vez, tiene ojos verdes y una prolongada cabellera lisa rubia cuyo flequillo es del mismo color que sus iris. Siempre lo lleva suelto, decorándola con una trenza que rodea su cabeza de un lado a otro por la parte de la nuca.

Pese a que en el fondo es una leona de nacimiento, Zeus la convirtió en un gato doméstico mortal y al día de hoy, su apariencia humanoide ha prevalecido dichos rasgos hasta que el dios dicte lo contrario. En su caso, las puntiagudas orejas gatunas que decoran arriba de su cabeza y la malgastada cola rubia cuya punta se aprecia maltratada; indicio de que se la cortaron y cicatrizó con el paso del tiempo. Las uñas de sus manos son afiladas y terminadas en pico como si fuesen las zarpas recortadas de un felino remilgado.

En cuanto a la vestimenta, utiliza un conjunto artesanal y cómodo para la vista y el usuario. Consta de los siguientes elementos: botas altas, medias negras sostenidas por un liguero, vestido turquesa, falda corta negra y guantes de acero inoxidable con forma de garras. Le cuelga cuatro hebillas de cinturón; dos en cada antebrazo superior.



“Nunca juzgues a un libro por su portada”. Este sería el dicho que la representa sin lugar a dudas. A pesar de su aspecto juvenil, Leonilda conoce más que nadie el peso del tiempo y cómo este puede tocar tan fondo en la vida de algunos hasta el punto de cambiar su percepción de lo que le rodea. El hecho de que sea tan longeva, la ha llevado a ser testigo de muchos acontecimientos históricos y también experiencias personales que la hacen dueña de una gran sabiduría; siendo alguien con gran conocimiento sobre los mundos a nivel cultural, económico e incluso social y que proporciona consejos allá donde vaya a cualquiera sin esperar una respuesta de vuelta.

Es una persona muy madura, impaciente, responsable, trabajadora y crítica tanto consigo misma como con los demás. Sabe que nadie nace sabiendo y que en ocasiones, se pasa de dura y marimandona con tal de que las cosas salgan tal y como ella organizó previamente. Siempre cumple sus promesas y obligaciones sin importar qué. También procura esconder sus sentimientos más profundos, por lo que apenas sonríe en público y se la reconoce como una joven tranquila y seria que prefiere hacer las cosas en solitario y a su manera. Esto se debe a que es muy desconfiada con los extraños y pretende aparentar ser alguien fuerte a los ojos de los demás. Por lo tanto, se avergüenza muy fácil cuando alguien se sorprende al verla siendo amable o femenina; aspectos que limita a personas muy específicas y que usualmente se pone nerviosa eludiendo, negando o justificando dichos comportamientos.

Cabe añadir que valora muchísimo la vida y odia de sobremanera a la gente retorcida e imprudente que chulea por ello o que desea la muerte de los demás del estilo: "Ojalá te mueras, no tenías que haber nacido, etc". Tampoco aguanta las bromas de mal gusto, siendo fácil sacarla de sus propias casillas debido a su gran temperamento y orgullo. En las situaciones como esta donde es incapaz de mantener la calma, es bastante bruta y suele recurrir a la fuerza para callar bocas. Un tirón de mejillas, una bofetada, un mordisco, un codazo, un pisotón, un chichón o hasta arrojar elementos del entorno la mar de pesados son algunos ejemplos. Posee un gran sentido de la justicia, determinación y firmeza, lo que le permite tomar decisiones sin miedo a equivocarse.


Entre muchas de las adaptaciones que se hace de la mitología griega, se especula que Leonilda fue una de las doce o dieciséis leonas que vigilan hoy en día, el templo dedicado al dios Apolo en la Isla de Delos.

Artemisa, que se trata de la hermana gemela de Apolo e hija de Zeus y Leto, la cazó para protegerlo de la ira de la diosa Hera durante toda la eternidad; temerosa de que ésta fuera a cobrarse su venganza por la infidelidad de su esposo, Zeus, con la sangre de ambos bastardos. Sin embargo, esto nunca llegó a pasar debido a que su padre consiguió que Hera nunca encontrara la isla y, en consecuencia, aquella joven y estoica felina de grandes dimensiones, pasó a ser tratada como a una mascota más a los ojos del pequeño e inexperto dios; formando parte de sus bélicas desventuras ya convertido en un adulto, devorando a cualquier adversario que se atreviera a contradecir las palabras de la propia deidad y siendo premiada con la inmortalidad tras consumir una manzana dorada.

Otras fuentes indican que durante la Guerra de Troya, la misma leona amamantó a Apolo en un momento de necesidad como lo hizo Luperca con Rómulo y Remo (fundadores de Roma) aun siendo estéril. Dicho acontecimiento sorprendió tanto a la diosa Artemisa que, a petición de su hermano, le dio forma humana y la educó para que fuera la décima musa que estuviera a cargo de las necesidades del venerado Apolo siempre y cuando tomara un voto de castidad. Durante la ceremonia, recibió por primera vez un nombre: Leonilda y a partir de ese momento, estrecharon tanto sus lazos que durante una descontrolada noche de pasión, surgió el amor entre los dos y se fundieron bajo la Luna.

Un día, un misterioso cuervo de hermosas plumas blancas observa a los dos enamorados en pleno acto y se lo comunica a Artemisa, la cual traicionada y llena de furia, transforma a Leonilda en una cierva por mancillar su virginidad. En consecuencia, la castiga siendo perseguida por sus sabuesos para siempre. Cada vez que la atrapaban y se la comían, regresaba a la vida emergiendo de las profundidades del Lago Sagrado de Delos condenada a recrear sin descanso su eterna muerte.

Estuvo sufriendo durante muchos siglos hasta que Zeus, cautivado por la belleza de la fémina, jura liberarla de su tortura si hacía realidad sus más lujuriosas fantasías en una sola noche. Ella se niega y la fuerza a hacerlo en contra de su voluntad. A sabiendas de que Leonilda era de las pocas cosas con las que podía controlar la ira de su hijo, decide desterrarla del Olimpo a la mañana siguiente bajo la faceta de un sucio gato callejero mortal después de cortarle la punta de la cola mientras dormía. Más tarde, Zeus entrega la cola a Apolo para anunciar el falso asesinato de la susodicha y aprovecha la ocasión para culpar de ello a sus enemigos con el propósito de que su hijo los destruyera por él.

Por desgracia, Apolo nunca se entera de la verdad ni logra encontrarla. Acaba olvidándola al igual que muchas amantes que tuvo a lo largo de la historia.


En la actualidad, reside en Albaburgo después de ser recogida de las calles de Grecia por el Augur Gula cuando todavía tan solo era un gato. Preserva la lealtad que le juró pocos años tras salvarla de ser engullida por la oscuridad de su desesperanza de un futuro próspero para ella; el mismo día que los Sincorazón atacaron su mundo de origen y accedió al Descenso del Corazón donde tomó la decisión de seguir viviendo. El mentor vio aquella luz y decidió que sería adiestrada con el propósito de blandir su propia Llave Espada. No antes, claro está, de que tocara su llavero para que adquiriera una forma más humana.

• Familiares:
  - Atalanta (Madre)
  - Hipómenes (Padre)
  - Partenopeo (Hermano)
  - Artemisa (Ama y madre adoptiva).
  - Apolo (Protegido y amante).
  
  
• Hobbies:
  - Buscar los sitios más cálidos para dormir de un tirón.
  - Tomar la siesta en lugares frescos durante el verano.
  - Echarse la siesta en lugares tranquilos y elevados.
  - Disfrutar de la naturaleza en toda su belleza.
  - Perseguir y capturar cosas pequeñas que se mueven mucho.
  - Tomar el Sol a primera hora de la tarde.
  - Coleccionar cualquier objeto adorable y mono.
  - La astrología (aunque le trae malos recuerdos).
  - Practicar tiro con arco.
  - Realizar manualidades.
  - Correr sin límites.
  - Aprender más conceptos sobre los secretos del corazón y sus derivados.
  
  
• Fobias y miedos:
  - La suciedad y el desorden.
  - Las aguas profundas.
  - Que la menosprecien por no saber nadar.
  - Fallar en sus propósitos y decepcionar a segundos.
  - Los dioses griegos.
  - El ensordecedor ruido de los relámpagos.
  - Los cánidos, sobre todo los perros de caza.
  
  
• Objetivo:
  - Ser reconocida como una heroína respetable allá donde vaya para tener siempre un lugar al cual regresar.
  
  
• Más datos de interés:
  - A pesar de que no termina las frases con un "miau", ronronea cuando se siente a gusto y, tanto la posición de sus orejas como la de su cola delatan su estado de ánimo como cualquier gato.
  
  - Leonilda tiene un agudo sentido del oído y es capaz de ver a través de la oscuridad. También cuenta con una gran agilidad y un equilibrio sobrehumanos.
  
  - Le encanta las manzanas rojas y cuanto más coloradas, mejor. Tampoco se puede resistir a los niños pequeños. Se derrite de ternura con tan solo verlos y le entra la necesidad impulsiva de abrazarlos para no soltarlos nunca.
  
  - Prefiere cambiar el aspecto de su Llave Espada a la de un arco con flechas cuando tiene que combatir en serio.
  
  - Una de sus mayores ilusiones en la vida es formar o ser parte de una familia numerosa donde ella asumiera el papel de madre. Al no poder tener sus propios hijos, adoptaría a tantos pequeños como le fuera posible.